Oso Leone fusiona el folk y el pop luminoso con aires mediterráneos, evocando paisajes mallorquines y la humedad del mar. Con influencias como Fleet Foxes y Bon Iver, crean cortes delicados de folk profundo, envueltos en terciopelo azul y salpicados por ecos psicodélicos. Su música es una parada obligada en la escena indie folk nacional.